jueves, 30 de diciembre de 2010

INDICADORES DE BUENA PRÁCTICA

A continuación, un extracto de un correo a una colaboradora donde aparecen los indicadores recogidos a lo largo del año.


…el título es sólo una guía para aportar la idea, después cada uno podrá escribir su propio artículo en una extensión máxima de tres folios. Los artículos quedarán englobados en un trabajo común que quedará complementado por una exposición fotográfica.

1. Historia y evolución de la arquitectura escolar en la comarca de…..
2. Necesidad de una entrada principal definida y elevada.
3. Comodidad térmica en centros educativos.
4. Ventilación natural y ahorro energético.
5. Importancia de la luz solar y las vistas.
6. Impacto de los sonidos.
7. Estudio de los aromas y prevención de malos olores.
8. Estudio de los colores.
9. Elementos para facilitar las exposiciones como fuente de motivación (paredes de pasillos y recibidores)
10. Recuperar elementos del pasado (tarima o anfiteatro) en salones de actos, aulas de plástica o música.
11. Elementos móviles (rodapiés técnicos, tomas de voz y datos)
12. Diseño efectista pero práctico y sostenible (gastos de reparación y mantenimiento)
13. Importancia de los elementos paisajísticos y de vegetación dentro del diseño integral del edificio.

Aunque es bastante exhaustiva no es una lista cerrada. Aparte del capítulo de historia que ha propuesto un profesor que estaría dispuesto a hacer el estudio, el resto son doce indicadores que creo pueden englobar cualquier aspecto que vayamos descubriendo durante la investigación.
Todos andamos muy liados con otras historias y, en principio, nos lo hemos tomado de manera altruista, a modo de hobby y para "gaudir", pero seguro que en un futuro, este barco llegará a buen puerto y habremos puesto nuestro granito de arena para humanizar y armonizar arquitectura y enseñanza.
Un fuerte abrazo,
Isabel

viernes, 24 de diciembre de 2010

¡Feliz Navidad y Nueva Década!






Gaudeamus Club os desea que en esta nueva década experimentéis el verdadero significado de la raíz de su palabra:

GAUDIR v.: cast. gozar, disfrutar.
|| 1. Alegrar-se, sentir goig intens per la possessió de la cosa desitjada.



Si te interesa el tema y su relación con la arquitectura y la psicología ambiental, estate atento al Boletín Informativo Nº1 previsto para principios de febrero.

Merry Christmas!

martes, 12 de octubre de 2010

Todo tiene un...PARA QUÉ.

Aunque parezca que no avanzamos...nada más lejos. The planet Earth mooooooves slooooowly!

www.gaudeamusclub.com

También tómate tu tiempo para investigar qué puede aportar eso del "coaching" a la educación.

Ah, y pase lo que pase...canta...¡siempre canta!

jueves, 18 de febrero de 2010

¿Cuál era el indicador número 3?





Los indicadores no siguen un orden de importancia. La intención es llegar a final de año con doce o catorce puntos que muestren lo que se considera útil para los usuarios y por tanto una buena práctica.


El Nº 3 se refiere a romper con la moda de “esconder” la entrada o hacerla laberíntica y, por otro lado, la necesidad de dotarla de elementos agradables a la vista. No hay porqué seguir esa corriente de arquitectura a la que hacía referencia la entrada del 3 de febrero, especialmente si eres de los que te gusta gritar con Bon Jovi We Weren´t Born to Follow...y el resto de la letra de la canción canción vídeo

lyrics

Debemos profundizar en los aspectos psicológicos y humanos del recibimiento. Por supuesto, se eliminarán barreras arquitectónicas para hacer los edificios accesibles, pero eso no está reñido con entradas dignas, claras y despejadas, físicamente estéticas y psicológicamente no agresivas.


Observemos la imagen 1 y la 2. Por regla general, un ser humano percibirá la imagen 1 como “fea”, una amenaza para su vida. Cada vez que pase por delante sentirá que su vida está en peligro y el cerebro, inconscientemente, se pondrá a funcionar para defenderse. La imagen 2, también situada en una entrada principal, pero estudiada como pantalla de elementos desagradables a la vista, podrá considerarse más o menos “bonita”, pero, el común de los mortales, no sentirá que su vida corre PELIGRO DE MUERTE! cada vez que pase por delante, la emoción será más bien de armonización de sus pulsaciones y su cerebro segregará sustancias más propias de un estado de calma.


Se trata de buscar una arquitectura de espacios afectivos, agradables, armónicos, huyendo de la agresividad, la incomodidad, la amenaza, la provocación innecesaria.


Indicador de buena práctica Nº 3 → Entrada digna, clara y despejada, físicamente estética y psicológicamente no agresiva.


miércoles, 3 de febrero de 2010

Sin duda... We can be lifted!





Soy de la opinión que en un centro educativo debemos procurar una formación que “eleve” el espíritu, la mente, las ideas…Y ese “elevar” se percibe desde los contenidos y metodología hasta matices en la arquitectura de los edificios.

En este sentido, la entrada principal es un elemento de suma importancia que debería estudiarse cuidadosamente. Lo que se vea desde ella, tanto hacia adentro como hacia afuera afectará a los usuarios. Cómo nos sentimos al acercarnos es un efecto psicológico que depende de numerosos factores pero, por regla general, se genera una sensación de amplitud de miras cuando al salir existe un espacio abierto y uno se encuentra elevado sobre el nivel de la calle. No es necesario encontrarse en lo alto de Chichén Itza, tres o cuatro escalones son suficientes.

La fachada principal, donde debería situarse la entrada, es un lugar emblemático de la institución, quizás el más emblemático, es lugar de recepción de autoridades, de bienvenida a compañeros de intercambios, donde se hacen las fotos de familia, dónde tienen lugar las sentadas de protesta, etc. La entrada debe diseñarse de forma clara, potente y amable para que los usuarios se sientan atraídos y los vecinos y viandantes satisfechos cada vez que pasen por delante.

En demasiadas ocasiones la arquitectura actual ha anulado la importancia de las entradas, incluso en las propias Escuelas de Arquitectura. No es extraño hoy en día, que después de varias vueltas por un laberinto de corredores oscuros y fríos, de pasar por delante de salidas de emergencia “decoradas” con graffiti y un par de señales de peligro de muerte que alertan de zonas de alta tensión eléctrica llegue uno a la puerta principal de una facultad, un instituto o una biblioteca. Son modas, y demostrar que lo contrario es más beneficioso es difícil, pero no nos damos cuenta de hasta qué punto esa arquitectura resulta perjudicial para la salud y provoca un efecto de querer “salir corriendo”.

Este mes propongo un sencillo ejercicio de percepción: al entrar y salir de edificios institucionales párate un momento para percibir cómo te sientes, cierra los ojos y “escucha” tus sentidos. Si tienes ocasión, date una vuelta por el campus de Tarongers en Valencia…o por la Biblioteca Nacional de Madrid o… por la New York Public library…Siente con los ojos cerrados cómo al salir, en unos edificios apetece acelerar el paso, mientras que en otros, inconscientemente tiendes a hacer un alto, respirar y llevarte lo aprehendido con el ánimo y convicción de que… we can be lifted…lifted from the shadow…lifted to new horizons...lifted...lifted!

we can be lifted…lifted from the shadow…lifted to new horizons...lifted...lifted!

domingo, 3 de enero de 2010

El arquitecto...¡Con la música a otra parte!

http://blog.bellostes.com/?cat=33


Hace relativamente poco que se está generalizando, en secundaria, una metodología en la asignatura de música como debe ser, al menos como entiendo yo que debe ser, es decir, una asignatura divertida y placentera, que deleite a propios y ajenos. Claro que para llegar a ese deleite hay que pasar por una fase de gorgoritos y estruendosos pitos, flautas y tambores…y qué culpa tienen los alumnos de aulas adyacentes que intentan filosofar, escuchar un “listening” en inglés o un simple dictado en castellano.

Cuanto más reflexiono sobre la necesidad de coordinación entre arquitectos y docentes, más importancia cobra el papel del arquitecto y la necesidad de que sea consciente de lo mucho que puede influir en la mejora de la calidad de la enseñanza y de la calidad de vida en un centro educativo, pues, aunque él deba ajustarse a unos programas predeterminados, dispone de una amplia libertad para ubicar los espacios, no así los usuarios que cuando nos entregan el edificio poco podemos hacer si las aulas de música se encuentran en el edificio central, planta central, con grandes ventanales para que el “ruido” de los ensayos se escuche alto y claro desde cualquier punto del Instituto.

Sin duda, es necesario que el arquitecto conozca algunos detalles, como por ejemplo, la utilidad de unas gradas, o, sobre todo, que si el aula no está dotada de aire acondicionado y cierres herméticos, como ocurre en la mayoría de los centros mediterráneos, las ventanas estarán abiertas una buena parte del año, y por tanto la ubicación idónea será en un extremo o zona lo más alejada y aislada posible del resto del aulario. Hemos luchado mucho para conseguir que los propios profesores de música entiendan que hay que cantar y tocar y que la autoridad no se consigue con clases teóricas y suspensos para que ahora nos echemos atrás porque los ensayos molestan e impiden que los demás den sus clases en condiciones de estudio.

Vaya mi felicitación a los profesores de música del IES Mediterrània, David Sabater y Carmen Martínez, por poner en práctica una metodología ”como debe ser”, a pesar de los obstáculos y a pesar de que en algunas cosas sean “difíciles de convencer”. Un cariñoso abrazo de ánimo para ambos. ¡Sigan ustedes haciendo sonar esas voces y esos carillones!


Indicador de buena práctica → 2. Aulas de música estratégicamente ubicadas.